Cuidado ecológico del hogar.
Nuestro hogar es nuestro pedazo de mundo en el cual podemos desempeñar una política ecológica que pueda impactar en el país y luego en el mundo. En ese territorio es que se proyecta nuestra sensibilidad en busca de un mayor cuidado a nuestro entorno. Es por ello que si quieres proteger el medio ambiente, pero no te sientes de animos para salir a sembrar plantas, a limpiar orillas de ríos o playas o simplemente no te visualizas recogiendo basura de los contenes.... Comienza con el pedazo de tierra que esta bajo tu gobierno y haz que sea un aporte al cuidado del medio ambiente! Vamos sé que puedes, intenta conmigo!!
Comencemos por los descontaminantes y ambientadores.
Los gases que normalmente contaminan el hogar proceden de la mala combustión en la cocina o estufas (monóxido de carbono), del humo del tabaco, y de los disolventes y aglomerados. Además de solucionar el problema en su orige, las plantas son descontaminantes excelentes que mejoran la atmósfera que se respira cotidianamente.
- Las cintas, el ficus o el rododendro son compañías excelentes en el salón, ya que eliminan el humo del tabaco y de los disolventes. Los cactus situados en las inmediaciones del televisor absorben por su parte las radiaciones de la pantalla.
- En la cocina se recurrir a las plantas aromáticas, como los geranios o la albahaca, que además de limpiar el ambiente, repelen las moscas y otros insectos.
- En el cuarto de baño, el potus y los helechos son notables absorbentes de la humedad del ambiente.
También es posible elaborar artesanalmente ambientadores a partir de elementos naturales.
- Un par de recipientes pequeños con agua ayudan a purificar la atmósfera de cualquier habitación: el agua limpia absorbe todos los olores.
- Un puñado de canela y otro de clavo en una olla con agua calentada a fuego lento generan efluvios gratos y perdurables.
- Un cuenco con flores secas, por ejemplo, lavanda, manzanilla, claveles y rosas, refrescan con sorprendente eficacia una habitación.
- La quema de esencias naturales es también eficaz. El sándalo relaja, mientras que el pino refresca.
- El molesto olor a tabaco e una habitación cerrada se elimina con un plato lleno de vinagre, que absorbe el hedor.
- Las plantas aromáticas (menta, romero, tomillo...), son poco exigentes y fáciles de cultivar.
- Unas cáscaras de limón y naranja en el fuego de la chimenea aportan un efecto aromatizante muy grato.
- El membrillo es un perfumador delicado y eficaz para los cajones y armarios con ropa.
- Se evita el uso de ambientadores en el cuarto de baño si se friega habitualmente con agua a la que se añade un chorro de vinagre.
Con estos consejos no necesitaremos de ambientadores que son perjudiciales para el medio ambiente!
Fuente: Libro: Ecología Doméstica, Autores: César Barba, José Luís Gallego, Sergi Ramis Pepe Verdú, Vida Cotidiana, Salvat Editores, S.A., 1996.
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